30 agosto, 2011



           Caminante, son tus huellas
                                                                el camino y nada más;
                                                                Caminante, no hay camino,
                                                                se hace camino al andar.
                                                                Al andar se hace el camino,
                                                                y al volver la vista atrás
                                                                se ve la senda que nunca
                                                                se ha de volver a pisar.
                                                                Caminante no hay camino
                                                                sino estelas en la mar.
                                                                                               Antonio Machado.

27 agosto, 2011

Anoche soñé que no te conocía, que me pedías que te acompañara al 
club social para pedirte una cerveza, porque no te la vendían. 
Pensabas que como tenía barba y vestía de negro no tendría problema. Yo aceptaba y nos emborrachabamos, acabamos en el tejado de la biblioteca y querías saltar cogida de mi mano a la fuente de abajo. Yo te decía que no llegaríamos a caer dentro pero igual salté.

18 agosto, 2011

Lasreflexionesdedosviajeros#.



Lo importante de saber si un viaje ha ido bien es observar con la fuerza con la que das la mano al comenzarlo y al terminarlo. 

1#.

Viajando contigo, en ti, a cada parte de tu cuerpo, lascivo, húmedo, inquieto, deseoso… A cada rincón de tu mente tímida, sincera, tierna cuando por nuestras mejillas corren gotas de lluvia.
Sentimientos impensables cuando tan solo éramos un par de locos en busca de nuevos placeres. Era invierno, llovía y con los días comenzaste a abrazarme cada vez más fuerte. Hasta que sentí que ya era una parte de ti. No podía existir nadie en el mundo que me abrazara como tú, no podía existir. 
Nuestros huesos bailaban y se rozaban como si buscaran quedar encajados para siempre en un último soplo de placer, nuestros pechos simulaban cascadas húmedas que no dejaban de deslizarse, como si quisieran acabar unidas, cada mañana amanecíamos siameses.











13 agosto, 2011


Que no quiero que pienses que cualquier palabra que sale de mi boca es para herirte ni para dejarte en un estado de psicodélia, contigo no podría. Y sé que muchas veces aparecieron tus demonios del pasado intentando descolocarte o persuadirte, pero si algo veo con los días es que has querido cambiar partes de ti, justo aquellas que nos hicieron daño.
Todos nos equivocamos. Y aprendemos. Tú aprendiste, mucho.
Te cercioraste de que no podías seguir por ese camino, que no había ni mañana, algo placentero a corto plazo, habría que valorarlo. Yo pienso que nada más, que ni siquiera las cenizas, quizás el borroso recuerdo de algo que ni siquiera fue. Valoraste.
Y te confieso desde lo más profundo de mi, que aunque quizás suene egocéntrico, tuve la sensación en varias ocasiones de ser una especie de rayo luz en la vida de las personas de las que me he enamorado, es curioso, aparecía y sin preveerlo comenzaban las sonrisas más sinceras, los sentimientos más puros, las palabras que siempre quedarán marcadas, las lágrimas espontáneas, las esperanzas, las ilusiones y el “nunca hay final”, y es que aun al borde del precipicio supimos elegir.
Y no me cuesta sacar uñas y dientes como una leona si es para luchar por lo que quiero, si es por compartir mis sueños más deseados con la persona que se ha vuelto fundamental en mis días. Porque sé que ella lo haría por mí. Porque te voy a contar un secreto, “cuando se miran el mundo se para de repente”.
Si alguna vez estoy lejos no olvides todo lo que nos rodeó algún día.
Que siempre podrás abrazarme, lloraremos juntos y sonreiremos después, amor.